La didáctica del arte trascendental: la formación espiritual al arte
Por formación "espiritual" se podría pensar a una educación caracterizada por la falta de concreción, más tendiente al lado místico filosófico que técnico, como se da en muchos lugares de enseñanza.
En nuestro instituto se apunta a educar los procedimientos prácticos y lingüísticos propios del medio de comunicación y expresión. Se trata de técnicas que tienen como objetivo la realización de un producido artístico que responda en primer lugar a los problemas prácticos del hacer. La realización de una obra de arte no puede prescindir del trabajo artesanal que sirve para darle forma, el que debe ser acompañado por el desarrollo de una particular sensibilidad subjetiva que creemos sea mucho más compleja que el oficio mismo. Esta sensibilidad la definimos como la capacidad del artista artesano de animar sus creaciones.
Nuestra didáctica, además de apuntar a la transmisión de técnicas artesanales o a procedimientos prácticos, trata de formar a los alumnos en su empleo lingüístico. Como sabemos, para convertirse en un buen literato no basta saber escribir correctamente sino que también hace falta desarrollar un propio lenguaje, una propia forma expresiva, única e irrepetible. Aprender técnicas prácticas es sólo el primer paso para poder encaminarse en la profesión, luego será necesario un recorrido, más interno que externo, en el cual el aspirante a artista pueda encontrar el propio carácter expresivo.
Se trata pues de comprender no sólo el alfabeto pictórico, sino también su correcto empleo al servicio de la propia personalidad.
Por este motivo en nuestros cursos y seminarios transmitimos los conocimientos que lleven a entender:
1. la naturaleza de los medios (pastel, carboncillo, óleos, etc.)
2. el empleo de estos medios en relación a lo que pueden entregar o no a los objetivos ilustrados.
3. el lenguaje visual (la forma, el espacio, el color, la luz, las texturas)
4. las motivaciones expresivas y comunicativas (el empleo que se quiere hacer de este lenguaje)
5. la relación indisoluble entre formas y contenidos
Del arte no se puede hacer una teoría sino que es necesaria la experimentación. Cuanto más experimenta una persona, más crece su conocimiento. Cuanto más experimenta poniendo atención a lo que hace, más rápidamente crece. Cuanto más tiene la posibilidad de cotejar con otros, más se da este crecimiento en el lenguaje comunicativo y no sólo expresivo.
Nuestros cursos no son teóricos pero a través de diferentes y múltiples ejercicios, sostenidos por elementos teóricos, se lleva al alumno a descubrir dentro de sí los fundamentos del arte, con la esperanza que estas experiencias -además de un desarrollo técnico lingüístico y expresivo- puedan contribuir al crecimiento espiritual de la persona y de sus obras.
>>> Anexos
Fundamentos de la Didáctica del Arte Trascendental
Diferencias entre la didáctica ESTETRA y el arte-terapia